Jugadores de la Semana
Los más destacados en las ligas invernales de RD, Venezuela, México y Puerto Rico
ESPNdeportes.com
El bateador designado y octavo en el orden al bate de los campeones Yaquis de Ciudad Obregón, Bárbaro Cañizares, se convirtió en la figura de la Serie Final, incluso superando al ganador de par de partidos, Luis Alonso Mendoza.
El cubano Cañizares fue participe directo en las cuatro victorias de los Yaquis en la final de siete partidos ante Algodoneros de Guasave, al producir carreras claves en cada uno de los triunfos del ahora representativo mexicano en la Serie del Caribe, Mayagüez 2011.
En el primer encuentro disparó un triple con la casa llena --no dio en 56 partidos en el rol regular y primeros 9 de playoffs--, para remolcar tres carreras que encaminaron a los Yaquis y Mendoza a ganar el primer juego de la final 8-1 a Algodoneros. El triple lo dio cuando el juego estaba 3-1.
En el segundo encuentro, pegó cuadrangular de dos carreras en camino a la victoria de 7-4, al dar ventaja de 3-0. Su batazo lo dio en la segunda entrada.
Tras par de derrotas de Yaquis, en el quinto encuentro en Guasave le regresó la ventaja a Yaquis en la serie 3-1, al dar un cuadrangular en la novena entrada con uno en base para sellar la victoria de 3-0, en que de nuevo lanzó y ganó Mendoza.
En el partido del campeonato el sábado remolcó la carrera que a la postre fue la diferencia en el triunfo de 5-2. En el rallie de cuatro carreras en la cuarta entrada produjo la segunda de la entrada con un sencillo, que al final fue la tercera de las cinco que anotó Yaquis para ser campeón.
Cañizares bateó .364 en los siete partidos de la final, al dar ocho hits en 22 turnos, anotando cuatro carreras y remolcando ocho, con par de dobles, un triple y dos jonrones, además de dos bases por bolas. Su porcentaje de embasado fue de .417 y su slugging de .818.
Mendoza merece mención especial al no tolerar carrera limpia en 14 episodios, en que le hicieron una sucia con 11 hits, dos pasaportes y nueve ponches y Algodoneros le bateó para .220. Fue el primer pitcher abridor desde la serie final 2005-06 (Pablo Ortega lo hizo ante Guasave) que gana dos partidos.
---Rubén Castro---
Muchos no lo conocen, ya que apenas comienza en el profesionalismo. Pero su más reciente actuación lo puso en la mirilla pública, por lo que ahora Reynaldo Navarro ya no es uno más dentro del equipo. El versátil componente de los Criollos de Caguas cerró con broche de oro la Serie Final de la Puerto Rico Baseball League para ser escogido el Jugador de la Semana en la décima cuarta y última jornada de competencia en el periodo comprendido del 23 al 29 de enero de 2011.
El bateador ambidiestro, que lo mismo puede jugar la segunda, tercera y campo corto, fue incluso seleccionado como Jugador Más Valioso de la última serie postemporada del torneo invernal boricua, ya que fue el héroe indiscutible en las dos victorias que les dieron el décimo quinto campeonato nacional a los Criollos, que no ganaban el título desde la campaña del 2000-2001 en la Isla del Encanto.
En el sexto choque jugado en el estadio Francisco 'Paquito' Montaner de Ponce, a sabiendas de que estaban entre la espada y la pared, Caguas logró empatar la serie y provocar un encuentro decisivo con un enorme cuadrangular de Navarro con el tránsito congestionado en la novena entrada. Luego, en el séptimo partido jugado ante unas 13,000 personas en el estadio Yldefonso Solá Morales del Valla del Turabo, con el juego empate a cinco carreras en la octava entrada, Reynaldo se vistió de héroe nuevamente al conectar un sencillo al bosque derecho que remolcó a dos compañeros para darles el triunfo a los Criollos.
Navarro, quien apenas tiene 21 años, lideró a su equipo en el clásico de invierno con promedio de .429 al conectar de 14-6 en seis juegos en que vio acción. De los seis inatrapables, tres fueron de doble mérito y un batazo de vuelta completa, los cuales le ayudaron a remolcar ocho anotaciones y anotar un par de ellas, siendo el líder en slugging con .857 al acumular un total de 12 bases en su excelente producción ofensiva.
Otro que terminó caliente la temporada fue Luis Montañez, que empujó cuatro carreras en el choque decisivo. El jardinero se fue de 29-9 en la final, con media de .310 al ver acción en los siete partidos, impulsó seis anotaciones y lideró a la novena al pisar el plato en siete ocasiones.
En causa perdida, el antesalista Jorge 'Kikito' Jiménez fue puro veneno al mantener a los Leones de Ponce en la pelea por el título, pero al final la novena sureña no pudo ante la inspiración de los cagüeños. El bateador zurdo terminó con promedio de .308 al batear de 26-8, con tres jonrones y un doble, impulsó nueve y anotó tres.
Su compañero William Collazo, quien reforzaba a los selváticos procedente de los Gigantes de Carolina, obtuvo dos de las tres victorias de los Leones en la final. Pero el zurdo, aún con su hermética actuación que incluyó una blanqueada de nueve entradas y excelente ERA de 1.23 en 14.2 entradas de labor, no pudo evitar que los Criollos se convirtieran en los representantes de Puerto Rico en la Serie del Caribe del 2 al 7 de febrero, que tendrá como sede el remodelado estadio Isidoro 'Cholo' García en la ciudad occidental de Mayagüez.
---Ralph Pagán Archeval---
La afición de Caribes de Anzoátegui siempre recordará de manera especial las conexiones de Luis Jiménez en la presente final. El inicialista que fue tomado en el draft de sustituciones, apareció en los momentos de apremio y fue un verdadero dolor de cabeza para los lanzadores contrarios.
Jiménez soltó 3 cuadrangulares en la serie. Incluyendo un estacazo de 2 carreras en el primer acto del duelo decisivo. El inicialista que recientemente firmó un contrato de Ligas Menores con los Marineros de Seattle, empujó otras 2 anotaciones en la baja del cuarto capítulo, gracias a un petardo con 3 en circulación. En total impulsó a 12 compañeros, igualando la marca en la liga. No en vano fue premiado con la distinción del MVP.
El nativo del estado Lara, promedio .286 (28-8), anotando en 4 oportunidades y consiguiendo 2 boletos.
Entretanto, la mención sería para Alex Herrera. El zurdo participó como relevista en cada uno de los 4 triunfos de los orientales. Acumuló 2 laureles, salvó un encuentro y se adjudicó un hold. Transitó 11.1 inning y dejó una efectividad de 3.24.
---Juan Aguilarte Rosales---
Aunque la Liga Dominicana de Béisbol no anunció oficialmente un ganador del premio al Jugador Más Valioso de la serie final, no cabe duda de que este año el galardón merecía ser compartido.
Y es que hubo dos peloteros que contribuyeron notablemente para que el conjunto de La Romana conquistara su segundo campeonato de por vida en la pelota quisqueyana y de paso ganara el boleto para representar al país en la Serie del Caribe.
Por un lado nos encontramos con el cerrador Julio Mañón, quien rescató tres de los cinco triunfos de los Toros, lanzando 3.2 entradas y permitió solo una carrera mientras dio dos boletos y ponchó tres hombres para aguantar la ofensiva de las Estrellas Orientales.
Del otro lado, tenemos al jardinero Ricardo Nanita, que no deslumbró con su promedio de bateo (.235) pero sus cuatro remolcadas de la serie decidieron, en el plano ofensivo, tres de las victorias taurinas.
Nanita también jugó una defensa importante y en el prado derecho hizo varias jugadas sensacionales que contribuyeron a evitar victorias de las Estrellas.
Por eso, aunque no se hizo de manera oficial, Mañón y Nanita fueron los Jugador Más Valiosos de la final dominicana.
---Dionisio Soldevila---
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